Cuando los minutos se empeñan en alargarse indefinidamente, con contumacia, no hay manera divina ni humana de acortar su duración. Las 20,00 h. iban a llegar exactamente después de las 19,59 y no antes. Pero llegaron y... ¡Qué gozada!
Hacía mucho que no iba a un festival de jazz, exactamente un año, y la ocasión mereció la pena: La sala llena a reventar, ambiente distendido, una Big Band solvente con un magnífico repertorio escogido al detalle y un publico entregado... Para qué más.
Cuando terminó, a eso de las 22,00 h, estaba sudando de tanto bailar, las manos me dolían de aplaudir y la sonrisa me daba dos vueltas a la cara. Cómo me divertí.
Felicito, abrazo a agasajo a los organizadores por su magnífico trabajo y sólo espero que el año próximo se superen. Está difícil pero lo conseguirán.
Este post no va de fútbol aunque, por lo que me cuentan, la cosa fue parecida.
3 comentarios:
Yo estuve disfrutando de una larga post paella.Pero no bailé ninguna danza con compás 6x2
¡OH! Qué linda alegoría. Barça, Barça, Baaaarça
Espero que la del miercoles haya sido mejor.
Que me da que la del domingo tambien sera buena
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