sábado, 7 de febrero de 2009

UNA COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN PROPIA DE HUMOR AMARILLO





Tachaaaan.

Empieza el espectáculo

(Mira cómo tiemblo, uuuuuh)

Ya se ha constituido la Comisión de Investigación en la Asamblea de Madrid, con la sana, noble y loable intención de esclarecer toda la movida organizada alrededor de los espionajes, vigilancias, contravigilancias, dossieres a, ante, bajo, con, contra, de, desde, entre, hacia, para, por, según, sobre, tras políticos de, esta, nuestra Comunidad de Madrid.

(Mira cómo tiemblo, uuuuuh)

Ya en la primera sesión, los miembros nombrados por la oposición de PSOE e IU, empezaron a sospechar que el asunto no va a discurrir por unos derroteros especialmente democráticos y transparentes cuando los comisionados del PP (no comisionistas, por favor) les proveyeron de unos coloristas monos fosforescentes, cascos, rodilleras, coderas y guantes con el fin de que no se hagan más daño del necesario en las innumerables celadas que les han tendido.

(Mira cómo tiemblo, uuuuuh)

De momento, como primera medida, en aras de la limpieza y el buen hacer, el Presidente de la C.S.I. (Comisión Sin Investigación), del PP, por supuesto, se reserva el derecho a permitir a la oposición repreguntar, es decir:
- “Buenos días, señor Presidente ¿Podemos empezar?
- Si.
- ¿Conocía la Sra. Aguirre...
- Perdone, Sra. Sabanés pero ya ha efectuado una pregunta...

Y así todo el rato.

(Mira cómo tiemblo, uuuuuh)

Pues bueno, pues vale, pues de acuerdo. Dicen que la risa va por barrios y los temblores por el cuerpo (¿Cuerpo del delito?). Parece ser que el inefable juez Garzón ha tomado cartas (y otro tipo de documentación) en el asunto y éste es otro de los que, cuando hace presa, no la suelta hasta que deja de moverse. Cuando los cite en la Audiencia Nacional ¿Le permitirán repreguntar?

Sólo faltaría que Rajoy cruzara la calle Génova y se pusiera, como los presentadores de Humor Amarillo, a descojonarse desde la esquina.

(Coño, cómo tiemblo, uuuuuh)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Te has quedado corto compañero, no es que estén temblando, están como una liebre cuando le das las largas, esperando asustados a que les pille el coche