viernes, 23 de noviembre de 2007

BARRIO SÉSAMO, DESENMASCARADO


Cuantas más vueltas le doy, más claro lo tengo, en esto de la educación infantil en Estados Unidos nos sacan varias vueltas de ventaja. Cuando nosotros queremos reaccionar, ellos ya han ido, vuelto, analizado, proyectado, ejecutado (con perdón) y celebrado el cuarto aniversario. La última perla la encontramos en la calificación de Barrio Sésamo como un programa para adultos, contraindicado especialmente para la correcta evolución mental de nuestras criaturas. Y pensar que mis hijos crecieron alumbrados por la dudosa sabiduría de la Gallina Caponata, Espinete, Don Pimpón y demás personajes, expuestos a que les pasara cualquier cosa, yo qué sé..., que salieran de izquierdas o algo peor.

Ahora que he visto la luz, me explico las distintas situaciones que, últimamente, se están viendo en Getafe. Si ponemos cara y voz a los personajes, seguro que saldremos del estado de estupefacción en que nos encontramos fruto, sin duda, de nuestra ignorancia e inocencia:

- TRIQUI, el monstruo de los nº 2 que devora a todos los candidatos a sucederle (Pedro Castro).

- COCO, nos ilustra al son de: Hola, soy Coco y hoy vengo a explicaros la diferencia entre Compensación y Expropiación (Ignacio Sánchez Coy).

- EPI Y BLAS, aunque duermen en la misma habitación, en sus camitas, su relación de amor-odio les puede (Carlos G. Pereira y José Luis V. Palencia).

- GUSTAVO, el reportero más dicharachero de Getafe al Día, le apasiona el verde (los billetes), le gustan las moscas y ha salido rana (David M. Pingarrón)

- PEGGY, su orgullo y dotes de mando no ocultan que se siente despechada por Gustavo y eso duele (Santos Vázquez).

- DRACO, al grito de A la rica gominola de piña, para el niño y la niña; nos asombra con sus mágicas obras (D’Emo).

Y algunos casos más que me callo por pudor.

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